Los odontólogos como profesionales sanitarios deben guardar todas las medidas necesarias para garantizar la salud de sus pacientes.
De igual forma, deben tomar las precauciones necesarias para mantenerse saludables y evitar la contaminación cruzada en los tratamientos que suministran.
Generalmente, los procesos odontológicos dan lugar a la generación de sangre, saliva y demás fluidos que surgen de los diferentes tratamientos que se aplican.
Para evitar que el paciente se ahogue y prevenir que al odontólogo le caigan algunos de estos fluidos o estos puedan interferir en la visibilidad, durante el procedimiento se usan los sistemas de aspiración.
Tipos de aspiración dental
Entre los mecanismos más usados en las consultas de un dentista están la aspiración seca y la aspiración húmeda como les explicamos en el artículo de tipos de aspiración dental.
La aspiración seca es un proceso por el cual se emplean motores y sistemas de aspiración para conseguir que la nube de microorganismos que se genera en los tratamientos tenga un alcance de menos de 30 cm. Generalmente funcionan con una centrifugadora.
De esta forma, en la aspiración seca o aspiración húmeda se usa un tubo que se introduce en la boca del paciente para recoger la saliva y restos de sustancias que se generan mientras se aplican tratamientos al paciente.
En la aspiración seca el aparato está formado por una cánula y un tubo o sonda de goma. Tanto en un caso como en otro se pone en funcionamiento la centrifugadora que ayudará a la separación de los tipos de residuos.
Las partes que forman estos sistemas de aspiración son una cánula y una sonda de goma, así como un motor de aspiración que incorpora una centrifugadora.
Este tipo de aspirador necesita que se use una pastilla antiespumógena que se aplica al filtro para evitar que se genere espuma en el sistema de aspiración.
La importancia de los sistemas de aspiración dental en el consultorio
Los sistemas de aspiración forman parte fundamental de la consulta de un dentista y del sillón odontológico.
Forma parte de los elementos que son necesarios para dar un buen servicio a los pacientes y para garantizar la seguridad y la salud tanto del paciente como del propio profesional.
Cualquier clínica debe tener sistemas de aspiración bien instalados que podrán ser de diferentes tipos.
Existen dos tipos de sistemas de aspiración: la aspiración seca y la aspiración húmeda.
La aspiración húmeda es un sistema por el cual un motor de aspiración trabaja en seco e incorpora un separador de agua y aire impidiendo que llegue al motor.
Por su parte, la aspiración seca hace uso de un separador centrífugo de aire y agua que habitualmente se encuentran situado debajo de las unidades dentales.
El uso de aspiración seca o de aspiración húmeda dependerá de los gustos y preferencias del profesional. No hay unas ventajas específicas de usar un sistema u otro. Ambos son igual de efectivos.
Cuidados del sistema de aspiración dental
Tanto si usas un sistema de aspiración seca o de aspiración húmeda lo más importante que tienes que tener en cuenta es que estos sistemas requieren de un mantenimiento y cuidados muy específicos.
La limpieza del sistema de aspiración seca o aspiración húmeda es muy importante, ya que hay que hacer una limpieza diaria con un desinfectante para evitar que se generen malos olores o que se puedan obstruir los conductos.
Ventajas y desventajas de ambos sistemas
Aspiración húmeda
A la hora de elegir el sistema de aspiración seca o sistema de aspiración húmeda hay que considerar las ventajas y desventajas que ofrecen estos sistemas.
Un sistema de sistemas de aspiración húmeda son sistemas más modernos y que ofrecen un mantenimiento mucho más sencillo y ofrecen un rendimiento de 300 litros por minuto por cada cánula de presión de vacío.
Se trata del sistema que usa la mayoría de las clínicas dentales.
Este sistema hace uso de una centrifugadora que ayuda a que se produzca la separación entre al aire y el agua realizando un proceso muy completo de limpieza de residuos líquidos.
No obstante, se trata de un sistema que presenta algunas desventajas como el hecho de que requiere de un sistema de desagüe en la sala de máquinas. También hay que citar como desventaja que requiere que el motor de aspiración esté en la misma cota que los equipos dentales.
Aspiración seca
El sistema de aspiración seca también ofrece sus ventajas como puede ser el hecho de que es un sistema mucho más económico. Puede ofrecer también un rendimiento bastante apropiado siendo de 300 litros por minuto y no necesita que se instale un sistema de desagües en el cuarto de máquinas.
En el caso de la aspiración seca no es necesario que el motor de aspiración esté al nivel de los equipos dentales, sino que puede estar en una cota superior.
Respecto a las desventajas que podemos encontrar en los sistemas de aspiración seca habría que destacar que requiere de un mayor mantenimiento que la aspiración húmeda.
En este caso, se necesita un sistema de desagüe en cada equipo dental.
La válvula selectora
La válvula selectora es una parte importante del sistema de aspiración seca o de aspiración húmeda debido a que permite determinar y regular la corriente de aire en la máquina de aspiración.
Esta válvula selectora es determinante para el buen funcionamiento de la máquina. Lo que consigue esta válvula selectora es que no haya ruidos molestos para el paciente y el odontólogo. Es una pieza clave de los recambios de aspiración dental.
Estos sistemas de aspiración son fundamentales en cualquier clínica dental y, por ello, es importante que la selección del sistema se realice atendiendo a diversos factores como puede ser el tipo de sistema que más interesa. La calidad de la centrifugadora que incorpora la aspiración seca o la aspiración húmeda y la facilidad para mantener estos sistemas en perfecto estado.
Sin duda, si tienes una clínica odontológica tendrás que seleccionar los mejores productos y aparatos para tus clientes que te ofrezcan las mejores garantías de seguridad tanto para ti como para ellos.
Te podemos ayudar a elegir el más adecuado para tu clínica dental. ¡Escríbenos!